Pregunta de Lluís Amiguet en La Vanguardia: ¿El presidente Biden es demasiado viejo para mandar?
Respuesta de Manel Domínguez: Esa pregunta es edadista.
El anuncio de Joe Biden, presidente de EEUU, de presentarse a la reelección en 2024 ha reactivado la polémica sobre su edad para gobernar. Es cierto que Biden tiene ahora 80 años, pero ¿eso le incapacita? o ¿tal vez los candidatos deberían pasar ciertas pruebas a los 75 años, como pretende Nikki Haley?
Es "normal" esta petición de Haley, candidata a la presidencia de los EEUU por el Partido Republicano, ya que su objetivo es matar dos pájaros de un tiro: Biden y Trump, de 76 años de edad, que se postula también como candidato republicano a la Presidencia.
Pero que los titulares de los principales medios de comunicación pongan el foco en la edad de Biden como factor principal para su continuidad en el cargo, bordea el edadismo o discriminación por edad:
El Mundo habla del "presidente más anciano de la historia de los EEUU". ABC tira de historial clínico y recuerda que "en 2021 se le extirpó un tumor precanceroso" y que en 2008 se había operado de otro similar. El País afirma que "su avanzada edad ya surgió como un asunto destacado en la campaña de 2020".
Al repasar las noticias sobre el anuncio de la candidatura de Biden, comprobamos que los medios insisten más en su edad que en sus aciertos y fracasos durante estos años: ¿Ha mejorado la economía norteamericana bajo su mandato?¿Ha habido avances sociales respecto al gobierno de Trump?¿Ha puesto sobre la mesa un plan de paz para Ucrania? ¿Qué está haciendo para mejorar sus relaciones con China?¿y con la Unión Europea?
Compramos o nos suscribimos a un periódico para que nos dé respuestas claras y concisas a estas y otras preguntas. A sus 80 años, Biden dice sentirse con fuerzas para continuar y los médicos no señalan lo contrario. Dejen su edad en un segundo plano y pongan el foco en las luces y sombras de su mandato para que los ciudadanos podamos tomar nuestras propias decisiones.
-----------------------------
Noticias relacionadas:
- Los chistes de Biden sobre su edad...
-Los accionistas de Repsol renuevan a Brufau como presidente por 4 años más, hasta los 79
- Edadismo: cómo la preocupación por cumplir años perjudica la salud
- Apreciar y cuidar el talento senior no es opcional
- El edadismo es la nueva discriminación en el mercado de trabajo
- Apreciar y cuidar el talento senior ya no es opcional
- España, ¿un país para viejos?
- Vienen grandes cambios en cómo trabajamos
Mas edad tienen los Papas, y míralos. Se creen divinos. La edad es un compendio de cosas que deben estar en equilibrio. Lo malo es un viejo adolescente ó un jovenzuelo envejecido. Y eso que no tengo mucho entusiasmo por casi ningún presidente. El Dalai Lama era admirado hasta que se le cayo la baba en publico hace poco.
ResponderEliminarSí, los Papas también están en el punto de mira edadista de los medios. Se les juzga no por sus decisiones o por sus actos, sino por su edad. El otro día cuando el Papa Francisco tuvo una indisposición, salió a relucir el asunto. Lo de los viejos adolescentes es algo sobre lo que me gustaría escribir en otra ocasión. Y qué decir de los jóvenes envejecido? Nada bueno.
EliminarYo creo que la edad puede influir, pero de todas formas no debe ser impedimento si se está bien de salud. Pero a mi no me gusta Biden por su hacer.
ResponderEliminarMe resulta difícil poner nota al mandato de Biden durante estos años. Hay cosas que parece que está haciendo bien pero me queda la duda respecto a Ucrania: ¿no debería poner sobre la mesa un plan de paz?
EliminarBueno, lo de edadismo, en época de los -ismos, aunque la RAE lo bendiga, me parece una tontuna.
ResponderEliminarYo si soy partidario de que entre el debate de la edad en una cosa tan importante como ser mandatario de un país. ¿No existe un límite de edad para el resto de las labores o trabajos?
Yo lo implataría hasta para conducir.
Un abrazo.
[V(B)iajero Insatisfecho].
Pues yo, Blas, no me opongo a que entre en el debate la edad de Biden. Lo que sugiero es que, a la hora de la reelección, se evalúe su labor tanto en política internacional (tengo mis dudas sobre cómo está llevando la guerra de ucrania) como nacional en lugar de su edad como primer requisito.
EliminarLo que Manel Domínguez, el autor del libro 'Sénior' propones es precisamente la revisión de ese límite de edad. Siempre, como dije en otra entrada, de manera VOLUNTARIA.
Un abrazo