jueves, 11 de febrero de 2021

Escaramuzas en Moscú

                    Borrell y Lavrov durante la rueda de prensa celebrada en Moscú (EFE)

La pasada semana Josep Borrell, Alto Representante de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, viajó a Moscú con la finalidad de entrevistarse con el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y explorar el estado de las relaciones Rusia-UE.

Unas relaciones complicadas desde 2004, cuando los países de Europa del Este se integraron en la UE. En los últimos años, las fricciones han ido en aumento: Crimea, Ucrania, Bielorrusia, las fake news de origen ruso (por no hablar de Libia o Siria)  han sido algunos de los asuntos que han provocado una tensión soterrada y nunca resuelta entre Rusia y la UE.

La UE parecía maniatada u obligada a contemporizar. Hasta ahora había expresado su disgusto y malestar, pero  el caso Skripal (2018) y el más reciente caso Navalni han colmado la paciencia de la UE, que ha enviado a Borrell para decir alto y claro su posición a favor de Navalni y en defensa de los derechos humanos.

                                     Josep Borrell en el Parlamento europeo

Borrell ha criticado en Moscú el envenenamiento, la detención y la condena de Navalni. Por su parte, Lavrov ha comparado la situación de Navalni con la de Puigdemont y ha dicho que la UE "no es un socio fiable". Para colmo, en mitad de un almuerzo de trabajo de Lavrov y Borrell, se filtra la noticia de la expulsión de tres diplomáticos europeos (de Suecia, Alemania y Polonia).

La reacciones no han tardado en llegar. La prensa ha calificado lo sucedido de "Encerrona a Borrell", "fiasco diplomático", "Rusia humilla a Borrell", "Bofetón en la cara de la UE". Más lejos han llegado las redes sociales: "Masacre diplomática en Moscú" y Puigdemont no ha perdido su oportunidad en Twitter: "El PSOE envía a Europa a una persona que ha demostrado su incompetencia".

La Presidenta de la Comisión Europea, muy cuestionada, dicho sea de paso, en estos momentos por la gestión de las vacunas, ha dado su apoyo a Borrell al declarar que se trataba de un "complicado viaje". No ha sucedido lo mismo con el Parlamento Europeo, donde algunos han solicitado la dimisión de Borrell. Habrá que esperar a marzo para conocer qué actitud adopta el Consejo Europeo pero, Alemania, Suecia y Polonia ya han dado su respuesta expulsando cada una a un diplomático ruso.

¿Quién tiene la culpa de esta chapuza? Naturalmente, Borrell en este caso es "la percha de los palos". Pero Borrell no ha viajado a Moscú por capricho. Borrell llevaba a Moscú un mandato de la UE. El problema es que "los grandes" (Alemania, Francia, Italia y España) defendían el viaje a Moscú de Borrell, pero "los pequeños" (los países bálticos y los del Este), que han sufrido directamente a los rusos, sostenían que en las actuales circunstancias no era oportuno el viaje de Borrell.

¿Aprenderemos la(s) lección(es) de este desaguisado?

------------------------------

Noticias relacionadas:

- Russie-UE: Un mépris que va trop loin

- Rusia no descarta romper los lazos con la UE, según Lavrov

- Iglesias: No hay una situación de de plena normalidad democrática en España

- La división sobre el Nord Stream2 amenaza con debilitar a la UE frente a Rusia

- Rusia y la UE

- Una estrategia europea para Rusia

- Rusia veta la entrada del Presidente de la Eurocámara en represalia por las sanciones

- Los socios del Este recelan aflojar la presión sobre Putin

- Rusia fractura la UE

- La portavoz de Navalni se va de Rusia



8 comentarios:

  1. Por favor, mira con detenimiento la foto de Borrell y Lavrov (foto 1). Es todo un poema. Ne gustaría que alguien como J.J. Millás la comentara como lo hace habitualmente en EPS.

    ResponderEliminar
  2. ¿Tantos intereses tiene la UE en Rusia para desembocar en este vilipendio?. La alta política siempre me ha traído un poco 'al pairo' pero si aquí hay alta política yo soy "obispo ortodoxo". Una metedura de pata como otras muchas. Una oportunidad para que el 'vicepresidente-ramplón' de Sánchez hiciera "alta política-destroyer". Casi me interesa más lo segundo, por ramplón.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues sí, Blas: Rusia tiene intereses en la UE, pero creo que el principal es debilitarla. Se mete en todos los "fregaos" que puedan contribuir a ello. No se ha subrayado mucho, pero en su momento se habló de su apoyo al independentismo catalán y me gustaría saber si ha hecho lo mismo con la salida de UK de la UE.
      Creo que. cuando pueda, le va a devolver a la UE el "favor" que le hizo con la ampliación a los países del Este. Con Alemania no se mete porque es fuerte, pero con el suministro de energía está jugando una baza importante y Alemania guarda más silencio del debido.
      La UE, está empeñada en desplegar su "soft power" también ante Rusia. Pero me parece que con Putin ésta no es una estrategia adecuada.
      Ya veremos hasta dónde llega esta metedura de pata.
      Un abrazo...y aplasta una moneda sobre el chichón. Es lo se hacía en tiempos: mano de santo!

      Eliminar
  3. Borrell dijo lo que muchos pensábamos al respecto de los derechos en Rusia. Y que Rusia compare el caso Navalni con el de Puigdemont... aunque estoy seguro que aquí algunos la aceptarán de buen grado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, es lo que pensamos...pero hay muchas formas de decir lo que pensamos. Para eso está la diplomacia: hay que medir las fuerzas propias y ajenas, hay que buscar el lugar, el momento, las palabras, el tono adecuados. Y eso es lo que se critica a Borrell y por lo que algunos piden su dimisión.

      Eliminar
    2. Por supuesto, para nosotros la situación entre Navalni y Puigdemont no se puede comparar. Pero Lavrov ha conseguido lo que quería: demostrar a su "parroquia" que en Occidente también se cuecen habas y dividir a la opinión pública. Pablo Iglesias "ha dado la razón" a Lavrov

      Eliminar
    3. De Pablo Iglesias prefiero no hablar

      Eliminar
    4. "María Zajárova, portavoz de exteriores rusa, ha tirado de ironía para preguntarse a quien creer, si a la ministra española de Exteriores, Arancha González Laya, quien aseguraba que España es una democracia plena, o al vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, que ponía en duda esa plenitud".
      https://cadenaser.com/ser/2021/02/09/internacional/1612889652_509946.html

      Eliminar