Día de las Bibliotecas

 24 de octubre. Día Internacional de las Bibliotecas que se celebra en recuerdo de la destrucción de la biblioteca de Sarajevo en 1992. ¿Cómo lo habéis celebrado? En Granada lo hemos celebrado con una charla de Luis García Montero sobre su relación con los libros y las bibliotecas.

Después de los agradecimientos  y confesar que se encontraba cansado porque viene de una semana en la Feria del Libro de Frankfurt, a la que llegó procedente de Guanajuato, comenzó a desgranar recuerdos de sus primeras lecturas y cómo su padre leía a sus hijos Las mil mejores poesías de la lengua castellana, citando en concreto La canción del pirata, de Espronceda.

Para descubrir las bibliotecas no tuvo que andar mucho. Después de situarnos en su barrio (cerca del Paseo de la Bomba y de la Biblioteca del Paseo del Salón) y su situación socioeconómica (una familia pequeño burguesa de la Granada de los años 60) y su colegio (los Escolapios) nos informa de que las casas de esos años tenían un salón de visitas, un cuarto cerrado a las travesuras de los niños en el que un día se coló y descubrió su biblioteca. 

                                   Biblioteca del Paseo del Salón (Granada)

Allí descubre a García Lorca, en una edición en papel biblia, en un lugar "sagrado" y allí comienza su relación con la poesía, que se acrecienta con la lectura de Ian Gibson y con las visitas a la Huerta de San Vicente, por aquella época semiabandonada y donde el guarda le dejaba pasear por la huerta, por la casa y por la biblioteca de Lorca.

Después de hacer una breve reflexión teórica sobre los libros y las bibliotecas, pasó a sus recuerdos personales: "Soy un bibliófilo, busco las primeras ediciones" de libros como Las mil mejores poesías, Impresiones y paisajes (de García Lorca), Campos de Castilla (de Machado), Teoría e historia de la producción ideológica (de Juan Carlos Rodríguez), de Castilla del Pino, de Alberti...

Finalizó su charla con la lectura de dos poemas: "Domicilio particular", del libro La intimidad de la serpiente, y "Lectores", del libro Un año y tres meses como expresión de su complicidad con Almudena Grandes en lo que se refiere a la lectura, los libros y las bibliotecas.

Tan solo añadir que la sala donde se desarrolló el acto estaba repleta de un público que tal vez esperaba más, pero aplaudió con ganas una exposición que fue clara y concisa, al final de la cual García Montero se levantó y no hubo lugar a debate. Las preguntas quedaron en el tintero.