lunes, 1 de diciembre de 2014

After the rescue*** (10-6-20

Hoy los ciudadanos nos sentimos como tras uno de esos exámenes de final de curso: durante semanas aguantábamos el calor, las noches de estudio, malcomiendo, abusando del café y del tabaco, los nervios a flor de piel, las discusiones con la novia y los amigos.

Tras el examen, solo quedaba una sensación de cansancio, de abatimiento. Era un estado casi catatónico: demasiado pronto para empezar a estudiar el siguiente examen o para hacer o pensar en cualquier otra cosa.

Algo así ha sucedido con el rescate:

Después de meses de tensión, tenemos la sensación de que el mundo se ha movido bajo nuestros pies y no sabemos en qué dirección caminar.

De pronto hemos visto confirmados nuestros peores -y reprimidos- temores: no teníamos un sistema financiero fuerte, para empezar. España era más parecida a Grecia de lo que sospechábamos. La ingeniería financiera y las fusiones bancarias no eran la receta. Las promesas electorales no eran ciertas y el "España no necesita un rescate", tampoco. 


















¿Y Europa? Europa era un viejo y destartalado paquebote moviéndose con demasiada lentitud en las aguas de Internet.

¿Cómo recibimos el rescate los ciudadanos?

Con temor y con esperanza.

Con temor, porque nuestros padres y abuelos han padecido cosas muchísimo peores, pero no han conocido algo parecido y no tenemos referencias. Tememos que nos suban los impuestos, que nos recorten salarios, educación y sanidad, que toquen las pensiones, que no genere empleo, que no seamos capaces de movilizarnos exigir una Comisión de Responsabilidades.

Qué esperamos?

Que nuestros temores sean infundados, que el crédito fluya, que la actividad se recupere, que nuestros hijos no tengan que pechar con nuestras deudas, que científicos e investigadores no tengan que emigrar, que la fiscalía funcione, que los responsables terminen en la cárcel, que los políticos rindan cuentas, que Europa recupere su velocidad de crucero...


21 comentarios Escribe tu comentario

eli

eli dijo

y que pasara realmente, a pesar de nuestras expectativas? hablando fundamentalmente en anios

Ulises

Ulises dijo

Pues espera sentado, querido Emilio. ¿Querías saber lo que yo pienso ahora con este rescate? Pues lee, lee el articulo que te enlazo debajo. Ya verás que el futuro es muy prometedor.
No es el fin del mundo, pero sí el de nuestras familias
Ulises

Ulises dijo

Pues espera sentado, querido Emilio. ¿Querías saber lo que yo pienso ahora con este rescate? Pues lee, lee el articulo que te enlazo debajo. Ya verás que el futuro es muy prometedor.
No es el fin del mundo, pero sí el de nuestras familias
Joaquín Sarabia

Joaquín Sarabia dijo

Estupendo escrito Emilio, que nos muestra los principales putos de vista.
Yo pienso que la verdad de cómo evolucionarán los contecimientos no lo sabe a ciencia cierta nadie. Esperemos que con un poco de de cada opción salgamos adelante del mejor modo posible.
efurom1

efurom1 dijo

Lo que vaya a pasar no lo sabemos, Eli. El post expresa esperanzas y temores y ni la mismísima Merkel podría decir en estos momentos qué proporción de cada uno lleva el cocktail que nos tiene preparado ;(
efurom

efurom dijo

Te digo la verdad, Ulises? No he sido capaz de leer con el detenimiento que requiere el enlace. Pero las cosas que allí he leído, aunque no son nuevas, al verlas todas juntas te pueden producir una subida de bilirrubina y otras sustancias a límites peligrosos. Hay que dar tiempo al tiempo para ir asimilando todo esto...
emilio

emilio dijo

Gracias, Joaquín. Estoy de acuerdo contigo: ni todo será bueno, ni todo será negativo porque eso (todo negativo) no hay pellejo que lo aguante!

Cástor Olcoz dijo

Pero, fíjate, Emilio: Empezó la prima de riesgo esta mañana bajando con fluidez y no tardé en volver a los 510 p, Ni siquiera el rescate amansa a la piara de ladrones que nos desprecian. Sin ser profeta, hace tiempo intuí, como predijo Semprún, que no es amor a Europa lo que abunda en el entorno, sino un secreto deseo de aniquilarla.
Un abrazo
V(B)iajero Insatisfecho

V(B)iajero Insatisfecho dijo

El 'anti-spam' éste me hace poner 'picadilly levanta' y me ha entrado una sensación muy rara ¿seré 'picadillo'? o ¿sólo seré un español más a quien piden que 'levante'?.
Te voy a decir lo que sentí no lo que espero: Me sentí engañado, a secas. Me sentí enfermo por la pandilla de políticos que tenemos en las alturas. Me sentí asqueado de tener que soportar la mentira, día a día.
Un abrazo.
emilio

emilio dijo

Pues si el rescat, Cástor, no es capaz de amansar a las fieras, cuál será el siguiente paso? ¿Empezará -o continuará- ahora el ataque a Italia?
No conocía esa predicción de Semprúm. No entiendo qué motivos pueden impulsar a nadie a desear su aniquilación. Pero supongo que sí, que los habrá. Un abrazo: EMILIO

trasindependiente dijo

Están muy bien las buenas intenciones que planteas, pero solo son eso, buenas intenciones de un ciudadano, de alguien que no tiene ningún poder, que ni siquiera tiene el pequeño poder de la representatividad democrática porque eso pertenece al pasado.
Estamos en una guerra, una guerra económica, y nosotros, los ciudadanos españoles en este caso, no somos más que una parte de sus víctimas.
Gracias y saludos.
emilio

emilio dijo

Así es Blas. A veces el anti-spam parece que nos hace un guiño. Otras, parece que juega con nosotros. De todas maneras, a los españoles nos conviene salir del K.O. lo antes posible: hay que levantarse!
Yo creo que esa sensación amarga que describes (la de engaño) es la que hemos sentido millones de españoles. Hemos aguantado 2 años pegados a las noticias de la prima de riesgo implorando que este momento no llegase nunca. Ese deseo imposible -porque se han hecho muchas fechorías- es el que falsamente han alimentado hasta el pasado sabado. En fin Blas, habrá que ir aprendiendo eso de 'agarrarse los machos'. Un abrazo: emilio

merhum dijo

Te felicito por el post, Emilio, y comparto esperanzas y temores. Un abrazo.
emilio

emilio dijo

Agradecido, merhum, y encantado de compartir, sobre todo esperanzas. Los temores también, pero ¡que sean pocos! Un abrazo: emilio

Carlos M dijo

Amigo Emilio, siento decir que lo sabía y que se van cumpliendo mis pronósticos, cosa que siento amargamente. Si cuando la reforma laboral, los corderos no se convirtieron en lobos, ya no hay esperanza. El acojone del terrorismo financiero ha hecho muy bien su trabajo, y la borreguez del pueblo ha sido ejemplar. Ni siquiera han dejado el deporte por la última bajada de pantalones. Nos vamos al pijo robados y humillados. Siento ser tan negativo, pero verás como el sábado una vez mas, la procesión fracasa.
Enric

Enric dijo

Yo me pregunto, quien se està beneficiando de esto en Europa? Porqué se mantiene una política que hunde a los pequeños? Y espero que los cálculos de estos aprovechados europeos les salgan mal, y se hundan ellos con todo el pasaje
emilio

emilio dijo

Pues yo debo ser más inocente, Carlos, porque creía que "la cosa" se iba a solucionar sin llegar al rescate (nada de prestamos en estupendas condiciones).
Hombre, la esperanza es lo último que se pierde: recuerdo el año pasado que publicqué una entrada en la que comparaba lagran movilización de los jóvenes portugueses y la escasa de los españoles...Esto fue unos días (¿semanas?) antes del 15-M: ¿quién lo hubiera previsto?
Lo que pasa es que aquí somos muy "explosivos": aguantamos lo que nos echen, explotamos y luego volvemos a casa...hasta la próxima, aunqe para esa puedan pasar años.
No te disculpes por ese sentimiento de ser "negativo". Lo negativo es que muchos están como si aquí no hubiera pasado nada.
emilio

emilio dijo

Ya sabes, Enric, que en estos últimos meses (años) se ha comparado mucho Europa con el Titanic. Los que van en primera clase creen disponer de salvavidas (para ellos) y los demás que se las apañen como puedan.
Estoy convencido de que alguno de los países fuertes de la UE tienen hechas sus cuentas: cuánto ganan estando dentro y cuánto si salen unos cuantos. Cuánto con el euro y cuanto sin él.
Por cierto, el otro día un economista decía que quien tenía que salir del euro era alemania. No me parece descabelladopero...doctores tiene la iglesia. Como decía en la entrada anterior, a nosotros nunca nos van a preguntar por este (y otros) asuntos. Nadie va a plantear un referendum.
emilio

emilio dijo

Me has retratado, trasinde...si cambiamos intenciones por estado de ánimo. Eso es lo que pretendía exponer: el estado de ánimo de uno que pasa por la calle, de un hombre sin "atributos de poder".
Por qué? Pues sencillamente, porque los medios han recogido las reacciones de políticos, economistas, banqueros, premios nobel...pero pocos, muy pocos ofrecen el "micrófono" a los que vamos a pagar. a los 'pecheros', a las víctimas. Un abrazo: emilio

fernandomaria dijo

Hola, Emilio. Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices en tu escrito y espero lo mismo que tú. Efectivamente, nos vienen engañando los políticos y mientras estamos ajustándo nuestras economías otros, los que nos metieron en la crisis, los dirigentes de algunos bancos que los llevaron a la ruina, etc...campan a sus anchas forrados de billetes. Ahora se habbla de controlar, ¿entonces antes no lo había? pues parece que no. Políticamente me encuentro en una etapa de total y rotundo descontento y pienso que los ciudadanos debemos tomar ciertas cartas en el asunto, al menos a la hora de acudir a las urnas y mandarlos a paseo. Una regeneración profunda hace mucha falta, creo yo.
Un abrazo, Emilio.

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